No hay nada que me guste más que los viajes express, cortos, de fin de semana, etc, como quieran llamarlos. Hacen bastante por uno... relajan, desconectan y lo que más disfruto de ellos es salir a pasear y comer rico. Durante enero fueron dos los mini viajes, uno en Santo Domingo y del cual les conté aquí y ahora en Con Con + Valpo + Viña durante este último fin de semana.
Nos quedamos en el Radisson, que tiene una increíble vista al mar, una exquisita terraza, una relajante piscina temperada de talasoterapia (con agua de mar) y un abundante desayuno. Lo disfruté todo.
Además, como ya les había dicho, con estos viajes la espera de las vacaciones no se vuelve tan eterna, sobre todo quienes las tomamos casi en marzo.
Les dejo algunas fotos...
Algo que se está volviendo una especie de tradición es que cada vez que viajamos a la V región dejamos un día para almorzar en el Café Turri. ¡Me encanta!
Entre el aperitivo y el plato de fondo nos sirvieron un pequeño sorbete de piña, la idea es "limpiar el paladar" para recibir como corresponden los sabores del próximo plato, sobre todo si la entrada o los aperitivos eran de sabores fuertes como el curry o incluyen carnes, pescados y mariscos. Obviamente cada vez se usa menos, pero como todo vuelve y además es tan sabroso, refrescante y bonito, lo pondré en práctica en alguna comida.
Espero salirme con la mía y organizar dentro de los tres fines de semana que quedan para nuestra vacaciones, algún otro mini viaje. ¿Alguna recomendación? ¿Maitencillo, Algarrobo...?